Me desperté y vi tus ojos cerrados y tu cara tranquila descansando plácidamente a mi lado.
Eran las seis de la mañana y yo sólo quería sentir tu suave piel rozándome cada poro de la mía.
Echaba de menos esa sensación de calidez, oír cosas bonitas susurradas en mi oído, sentirme especial y única... Como cada noche, como con cada tío...
Pero no era una noche más, ni un tío más...
Eras tu.
Ese que me remueve las entrañas y me hace ser visceral y emocional hasta la médula.
Ese que podría desgarrar mi corazón como si de un simple folio de papel se tratase.
Recapacitando me he dado cuenta de que soy capaz de conseguir mis metas, de que a pesar de no tener títulos que lo certifiquen estoy capacitada, de que por fin se estar sola, de que no te necesito aunque si te eche de menos, de que soy consciente de que a demás de "ser una de las más punteras" puedo obtener grandes beneficios si la constancia y la suerte caminan de la mano, de que ahora mismo lo tengo que dar todo por mi futuro...es ahora o nunca.
Ojalá estuvieses aquí cada día para ver esos ojos cada mañana, para sentirte cada día, para abrazarte cuando quiera... Ojalá el destino decidiese que debemos estar juntos y fueses feliz y estuvieses tranquilo a mi lado... Ojalá nada fuera tan complicado o todo fuese más sencillo...
Ojalá la vida te haga caminar cada día de mi mano
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