2- Volvi del negro al gris y fui recuperando los colores hasta que viaje lejos para encontrar el rojo y me tope con un muro marron de mierda...no me quedo mas remedio que volver a mi gris que por lo menos era conocido.
3- Recupere el rumbo de ese gris casi negro y me abrieron a un azul celeste...hasta que ese celeste desaparecio en la noche, de la noche a la mañana y me dejo de invitar a su casa y a su cama.
4- Encontre mi propio azul y me meti de lleno detras de los telones rojos y de las tarimas marrones de madera donde me tope con que las rosas eran amarillas y los verdes podian llegar a brillar.
5- Cogi mi propia flor y ahora estoy en medio: donde todo es gris, a veces echo de menos a celeste, tengo un amarillo casi negro y un rojo profundo que en momentos desaparece y se vuelve de un verde picante.
Menudo caos de colores.
Solo me encuentro con mis viajes,
con la soledad de la compañia austera en un tren lleno de gente donde me encierro en mi musica,
con el descubrimiento de lo nuevo...
Quiero seguir haciendo locuras,
gastando adrenalina como cuando me monto en el nuevo inverter de Pucela,
como cuando me cojo un tren a una ciudad que apenas conozco
para adentrarme en una nueva compañia de teatro,
como cuando cruzo una mirada penetrante con alguien que no conozco...
Quiero que siga la chispa,
no sentir que todo es rutina...
Pero esque mi vida alguna jodida vez a conocido la rutina?
Vida de colores...porque me encanta pintar mi propio teatro isabelino...lo que no se es si el se atreve realmente a pintarlo conmigo o soy demasiado exigente para alguien que vive la vida con demasiada tranquilidad...
No hay comentarios:
Publicar un comentario